little chicks, little lives

 Una vez teníamos todos el material y las piezas necesarias para crear las incubadoras, nos pusimos manos a la obra. Nuestro profesor nos ayudó conectando cables o haciendo agujeros. Pero nosotros pelamos cables, atornillamos o pusimos bridas . Fue un poco costoso porque lo hacíamos cada recreo y como íbamos a tener dos incubadoras (una para cada sección), teníamos que hacer el trabajo doblemente.  Por fin acabadas ya las incubadoras, sólo nos quedaba conseguir las condiciones óptimas con las cuales los huevos se incuban hasta que los pollitos eclosionan.  Configuramos el termostato, colocamos un vaso de agua para que hubiera humedad dentro de la incubadora, colocamos el higrómetro dentro y las dejamos enchufadas unos días, en los que hacíamos mediciones y comprobábamos si los parámetros de temperatura y humedad eran los que buscábamos.

Salimos a comprar el material que nos faltaba. Nos reuníamos en grupos pequeños para ir a las diferentes ferreterías de Villafranca y así poder encontrar los mejores precios y las mejores piezas.  Nos quedaban los aparatos que irían dentro de la incubadora: el higrómetro , la bombilla de calor y el termostato , ya que no los pudimos encontrar en las tiendas locales. Nuestro profesor las compró a través de internet y se lo pagamos con nuestro dinero.